Que maravilla de acuarela! me recuerda a las ilustraciones que se hacían para documentar las expediciones naturalistas del XVIII y XIX. Enhorabuena, es un gran trabajo.Saludos.
Me resulta especialmente atractivo el contraste no sólo de tonalidades sino de texturas entre animal y tronco: una forma de resaltar el objeto principal y de hacerlo parecer aún más vivo. Felicidades.
Una maravilla. Lo único que le falta es lanzarse a por el pececillo.
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias Pini
ResponderEliminarUn saludo
Perfeito!!!
ResponderEliminarBeijo carinhoso.
Un fenómeno Gonzalo, como siempre. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias a los dos
ResponderEliminarUn saludo
Que maravilla de acuarela! me recuerda a las ilustraciones que se hacían para documentar las expediciones naturalistas del XVIII y XIX. Enhorabuena, es un gran trabajo.Saludos.
ResponderEliminarMuchas gracias.
ResponderEliminarMe resulta especialmente atractivo el contraste no sólo de tonalidades sino de texturas entre animal y tronco: una forma de resaltar el objeto principal y de hacerlo parecer aún más vivo. Felicidades.
ResponderEliminarMuy bonito tanto el blog como tus trabajos.
ResponderEliminarSaludos